Edificado en el lugar del antiguo hospital de San Miguel. Posee un airoso patio central que da luz a las dependencias administrativas a las que se accede por una escalera bifurcada. La alcaldía compone un singular rincón de reminiscencias árabes y recuerdan ostensiblemente al visitante que está en la ciudad donde nació el celebrado inspirador de la Alhambra. Construido a finales del s. XIX sobre el solar de un antiguo hospital de beneficencia, San Miguel, es quizá el edificio civil más destacable de Arjona. Mediante escalera doble de piedra, se accede a la segunda planta donde se ubica, aparte de las dependencias municipales, el salón de plenos y el despacho del señor alcalde.
Mención especial merece el Archivo municipal, que cuenta con importantes fondos, la joya es Historia o Anales del Municipio Albense urgavonense o Villa de Arjona, de Martín de Ximena Jurado, así como una serie de privilegios otorgados a Arjona por los reyes castellanos durante los siglos XIII, XIV, XV y XVI.
LA ALCALDÍA
Despacho del antiguo palacio (situado en lo que hoy es el parque de María Luisa Ortiz) de don Fernando Ruano Prieto, Barón de Velasco. A mediados de los años 20 y como previo a la celebración del tercer centenario del descubrimiento de las reliquias, es desmontado y trasladado pieza a pieza. Perteneciente al arte neomudéjar, con reminiscencias árabes principalmente recordando el esplendor decorativo del periodo nazarí (la Alhambra de Granada) Como motivos decorativos, podemos encontrar, en primer lugar, la lacería en el zócalo cerámico que emplea motivos geométricos estrellados y epigráficos, repetidos en el techo. Es un alfarje a base de maderas o yeserías geométricas policromadas y en parte de los paños de los muros del interior de la estancia. La epigrafía, versículos del Corán, rematando el zócalo y enmarcando los dinteles de los arcos. Como anécdota resaltar que al intentar leerlos uno de ellos se colocó al revés.
Como elemento sustentante, hay que destacar la columna. Es de basa vidriada con decoración geométrica, fuste de mármol rosa y capitel compuesto de orden jónico con hojas de volutas y de orden corintio con hojas de acanto con motivos de ataurique.
Encima se deja ver un finísimo cimacio como punto de arranque de sendos arcos. Obra de arte finísimo, reflejo de lo que fue la decoración y arquitectura nazarí.
LA LÁPIDA TEMPLARIA
Dibujo geométrico en mármol, encierra en su intrincado cúmulo de estrellas, círculos, cuadros y líneas, el camino para poder conseguir el auténtico saber antiguo, aquel que usaba Salomón para comunicarse con el Dios primitivo. Confeccionada según el arte de la Cábala transmitir a lo largo de los siglos entre iniciados que deseaban remontarse a los misterios de este Dios Universal.
Colocada inicialmente en la Cripta del Barón de Velasco, miembro de la Logia Los Doce Apóstoles, decorando el frontal del altar fue sustraída por un obrero tras las obras de restauración de la iglesia de San Juan en 1956. Recuperada en Granada por Juan Eslava Galán, historiador nacido en Arjona, la donó al pueblo. Desde entonces, la lápida ha permanecido empotrada en un muro del patio de columnas del Ayuntamiento de Arjona, donde actualmente puede contemplarse. En la Cripta se ha colocado, recientemente, una réplica de esta lápida.